Me han pasado muchas cosas, he conocido a muchas personas, personas malas personas buenas, pero conocer a Claudia ha sido de las mejores cosas que me han podido pasar, es de las mejores personas que haya podido conocer jamás. Los últimos años de mi vida la he pasado muy confundido, pero de eso hablaré en otra entrada, la he pasado muy mal, el futuro cercano que llaman destino me ha dado la espalda en casi todo acto que hize.
Este estado de inestabilidad desaparecieron cuando apareció ella. Entró y le dió sentido a mi vida (por más extraño que paresca es así) Me gustó el verla esa primera vez, sentir su mirada y comenzar a cruzar miradas discretas por momentos, al comienzo fue la verdad muy incómodo, fue incómodo porque nos conocimos cuando yo estaba en una situación no muy favorable para iniciar una relación, yo salía con otra persona. Las cosas no funcionaron del todo bien con la última relación que tuve así que decidí estar solo. Pero no estuve tan solo ya que luego de conocernos Claudia y yo nos apresuramos demasiado, fuimos enamorados al poco tiempo, pero esque es así cuando sabes que ESA persona está alfrente y no tienes más que hacer que decirte que es la que siempre estuviste esperando.
Estando de enamorados la pasamos bien, nos sentimos bien y no podemos estar mucho tiempo separados, prometimos demasiadas cosas, prometimos casarnos, prometimos tener hijos,prometimos quedarnos juntos hasta viejos y mantener encendido el amor, el mismo amor que tenemos ahora y nos une más. Es la primera persona a la que prometo tales cosas. En el caso de ella tal vez no sea yo la primera persona a la que le haga tales promesas, pero no importa, sé que no soy el primer hombre en su vida, ella tampoco es la primera mujer, somos un par de tipos con cuerpos impuros deseando ser felices, pero en mis planes está ser el último que ella tenga. Como dicen por ahí: 'Ser el primero puede ser perfecto, pero ser el último es un EXITO.'
Digo la verdad cuando confieso que nunca hize promesas con tal sinceridad y no me arrepiento de haberlas hecho, Claudia es la mejor chica que he conocido hasta ahora y no conoceré a nadie igual (por el hecho de que cada persona es distinta a las demás), así como sé que no conocerá a nadie igual que yo (por el mismo motivo). No puedo ser tan falso al hacerle las mismas promesas a otra mujer, si las cosas no funcionan con ella no funcionarán con nadie, no pienso vender el mismo cuento a otra mujer que no sea la primera a la que se lo dije con el alma en las manos. Mis sentimientos son egoístas y los mantendré siempre así.
Sé que si las cosas no funcionan con ella, no funcionarán con nadie más. El destino no me pudo poner mejor persona en el camino que Claudia, sé que le he pagado mal a todas las chicas con las que he intentado algo, pero con Claudia es distinto porque ella es muy sincera, de un corazón limpio y puro (sueno muy estúpido y algo afeminado al hablar así de una persona, pero cuando el amor llega, llega, y no importa como lo expreses lo importante es explayar todo el sentimiento y en mi caso, escribirlo)
Quiero pasar más tiempo con ella, es la chica con la que quiero pasar el resto del tiempo que me queda, es la chica que quiero que esté a mi lado cuando ya no pueda más, cuando todos ya se hayan ido quiero solo estar con ella al lado y prometerle unas vez más que no me separaré de ella. Puedo pasarla callado al lado con ella sin decir nada, y aún así la paso bien, porque su sola presencia me hace sentir bien, estar con ella me hace demasiado bien, sentirla cerca es la mejor terapia para esta mente tan enferma.
Amo tanto a esta chica que su felicidad está por encima de la mía y de todos los demás porque la amo como a nadie y lo es todo para mi, por lo tanto si ella no es feliz, yo tampoco.
Yo la amo demasiado, siento que el mundo se me cae encima cuando discuto con ella, y tengo que abrazarla tragándome el poco orgullo que me queda, siempre cuando llega el momento me gusta alargar las despedidas un par de minutos más, la he hecho reír y llorar, le hize reír hasta llorar y le hize reir cuando no podía dejar de llorar.
Prometo a Claudia quererla y amarla hasta ya no tener fuerzas, el sentimiento es sincero y las ganas de tenerla cerca y hacerla feliz son infinitas. Sé que ella me ama a mi también y me demuestra con cada acto que lo hace cada vez más. Siento tan sincera cada palabra que pronuncia, soy como un niño que cree todo lo que ella me dice. Suelo tratar de ser el enamorado perfecto con ella, el enamorado que ella se merece y el que quisiera tener siempre a su lado.
Por el futuro perfecto que deseamos los dos, y burlando cualquier posible mal jugada del destino. Con mucho amor, para Claudia. Ojalá ella pueda leer esto.